Además de nuestra alta calidad en las reparaciones de los sistemas de inyección diésel, nos esmeramos en la estética de estos productos.
Siempre buscamos dejar los componentes con un acabado similar al de un producto nuevo. Para lograrlo limpiamos mediante carburo de silicio y microesfera de vidrio disparadas a presión en las piezas que permiten este proceso. Para las partes internas, hacemos limpieza con líquidos especiales para las tinas de ultrasonido.
Después del proceso de Sand Blast, realizamos una limpieza profunda de los componentes, primero con agua a presión y, por último, con aire seco a presión, de esta manera eliminamos todas las partículas del carburo de silicio y microesferas de vidrio.
Para este proceso desarrollamos herramientas y dispositivos que nos permiten cubrir y aislar áreas en las cuales no se debe disparar carburo de silicio; también sellamos, en el caso de los cuerpos de las bombas, toda la parte interna para proteger sus conductos y evitar que se contaminen con el carburo de silicio y microesferas de vidrio.